SEXO FEMENINO Y MODAS

Hace 4 años conocí a Julia, en un viaje a Ibiza. ¡Que mujer tan bonita!

Mujer esbelta, pelo blanco, precioso y largo, con mirada de niña y multitud de arrugas que me contaban infinitas historias. Rezumaba frescura y juventud, como muchas mujeres que después he conocido en la isla, cercanas a los sesenta-setenta años, que han elegido un tipo de vida, (vida externa y vida interna) que hace la diferencia con otras mujeres que por su forma de vida se han desconectado de sus alas de libertad y la eterna juventud que nada tiene que ver con el paso del tiempo.

Hablábamos de moda sostenible y su armario era pura feminidad.

Me gustaba observarla cada mañana, a la hora del desayuno, como se preparaba el agua caliente con el romero y limón que recolectaba en su propia tierra. Pan de centeno, aguacate, semillas de sésamo tostado y  aceite de oliva ecológico.

Entrar en su cocina era lo que me producía mayor regocijo. Se veían pocas cosas y mucha consciencia en la alimentación. El resto de la casa… emanaba un aire zen, y… multitud de libros.

Recién levantada Julia está más guapa y es cuando mejor pueden apreciarse las huellas que el  paso de los años ha grabado en su cuerpo.

“Solía pensar que las mujeres cuando daban a luz, paraban de menstruar para crear nueva vida, y cuando paraban de menstruar en la tercera fase de su vida, en este período en particular de nuevo retenían la sangre de su cuerpo no para crear un bebé si no para crear sabiduría. Esta es la clase de respeto que los pueblos indígenas solían tener por sus mayores.” Jean Shinoda Bolen.

Encontrarme con una mujer así, cercana a los setenta, de esa belleza, naturalidad, juventud y frescura me hizo reflexionar sobre lo equivocadas que estamos las mujeres luchando en batallas perdidas contra el paso del tiempo, pensando que las operaciones estéticas nos van a devolver algo que solo pueden conservar las mujeres de esa edad que aceptan, se abren a la vida y no se avergüenzan de sí mismas… Eso las convierte en sabias.

Es un gran trabajo, nada fácil, y es la única manera de llegar bonita por dentro y por fuera…. Esa palabra que te cambia la vida, “aceptación”.

En ciertos ámbitos, y más en el mundo de la moda, intentar mantenerse siempre en esa imagen perfecta e impecable con el tacón y la melena deslumbrante desde el desayuno hasta que llegas a casa resulta agotador… Mantener tu propio equilibrio exige que esta pose se caiga… para siempre o… ¡aunque sea muy de vez en cuando!

Hecho a mano en Alpaca por mujeres artesanas

No seguir los estereotipos de la moda es un signo de personalidad y desde luego la verdadera Belleza (con mayúsculas) tiene mucho que ver con esto.

Para poder apreciar la verdadera belleza de un ser humano, la mirada ha de surgir del corazón y debe atravesar un montón de capas de condicionamientos…. y esto… no es fácil, nada fácil.

La más grande historia de amor es la que una vive consigo misma. Cuando vives estereotipos creados para gustar a los demás corres el riesgo de desconectarte de lo más importante.…

La moda ha existido desde tiempos inmemoriales, es todo lo que vestimos en determinadas épocas o períodos… marcando la historia, es un reflejo de muchas cosas, de formas de pensar, de cultos y creencias, del clima, del estado de ánimo.

Hecho a mano en Alpaca por mujeres artesanas

La moda es un legado vivo, es un libro de cuentos; el cuento de la humanidad desde una perspectiva más…

Todas las edades en la mujer son incomparablemente bellas en sí mismas y no deberían verse desde ciertos cánones y estereotipos.

Mucho Amor!!

Deja una respuesta

Este sitio utiliza cookies para ofrecerle una mejor experiencia de navegación. Al navegar por este sitio web, acepta nuestro uso de cookies.